You & Me

Todavía estás viajando en tren y mi cama todavía tiene tu olor, todavía estaba esa carta en el campera que no quería que leas pero era tuya. Hoy viniste a dormir a mi casa, a mi cama y todo fue hermoso como antes, como siempre, como nunca. Que vinieras hoy significaba para mí muchas cosas: que todo está bien, que casi nada cambió, que te veo sentada en cama como el primer día que viniste a mi vida, que te extraño y mucho.

En estos 2, casi 3 meses me aconsejaron, dijeron, retaron y lloraron muchas personas a mi lado. Y aunque les daba la razón en esos momentos porque me hacían ver su punto de vista y trataban de ver que es/era lo mejor para mí siempre sostuve algo en mi cabeza: Nadie puede entender como me siento cuando estoy con vos.

Es así, nadie lo puede entender o muy pocas personas quizás, pero cuando estoy con vos es como todo mágico, desde el beso que me das de bienvenida hasta el último que nos damos para despedirnos, la alegría creo que se compara con un bebé riendo, un abrazo de unos amigos que no se ven durante mucho tiempo o una pareja de abuelos caminando por el parque de la mano.

Hoy hablamos y adelantamos algo porque la solución va a llegar hablando y cada uno poniendo sus condiciones, miedos y reproches. Vos fallaste y yo también y eso estamos hablando. Voy a hablar con mi psicóloga mañana para que me ayude a confiar de nuevo en vos, sé que la solución va a venir de mí y no de otra persona, pero ella me ayuda a ver todo en perspectiva, a saber que es lo que quiero y a saber buscarlo para después encontrarlo. No sé cuanto tiempo tome para encontrarlo y para no hacerme sentir mal porque salgas o te vayas a bailar con tus amigas los sábados. Pero voy a trabajar en eso.

Me gusta dormir a tu lado y sentir tu respiración, tus abrazos y tu aroma (a hogar, como te dije una vez). Me gusta ir al cine con vos y ver películas donde se que vas a reír y a contagiarme de ese sonido tan lindo que sale de tus pulmones por tu boca. Me gusta caminar de tu mano y abrazarte fuerte hasta que quedes casi sin respirar. Me gusta comer a tu lado y darte de comer en la boca. Me gustas vos.

Voy a trabajar en eso, en la confianza (y el título a mí me ayuda aunque a vos no).

Me gustaría verte el viernes si se puede, espero bajo el frío como vos hoy pero te ayudo a cocinar algo rico después dale? Así de paso la veo a Luna que la extraño.